En México, la determinación de alturas mediante GNSS sigue un principio fundamental: la altura que entregamos no depende solo del receptor o del software, sino del modelo geoidal y del sistema vertical adoptado.
Ante la referencia reciente al Geoide Gravimétrico Mexicano 2025 (GGM25), surge una duda legítima entre topógrafos e ingenieros: ¿ya debemos migrar a este nuevo modelo?
Para responder correctamente, primero hay que aclarar qué usamos hoy y por qué.
Actualmente, en México se utiliza el Geoide Gravimétrico Mexicano 2010 (GGM10).
El GGM10, publicado y mantenido por INEGI, es el modelo que:
Se emplea de forma estándar para convertir alturas elipsoidales GNSS a alturas ortométricas.
Es compatible con la Red Geodésica Vertical Nacional.
Está alineado con el sistema vertical oficial vigente (NAVD88).
Por esta razón, la gran mayoría de los proyectos de topografía, obra civil, catastro, infraestructura y levantamientos GNSS en México continúan basándose en el GGM10.
El GGM25 representa una evolución técnica del modelo geoidal nacional, impulsada por:
Una red gravimétrica más densa.
Estaciones GNSS de monitoreo continuo más modernas.
La alineación con estándares internacionales como el International Height Reference System (IHRS).
Sin embargo, es importante ser precisos:
El GGM25 no ha sustituido formalmente al GGM10 como modelo operativo oficial para la entrega de alturas en proyectos productivos.
Aunque existe referencia bibliográfica, no se ha publicado aún una especificación normativa completa que establezca su adopción oficial.
Uno de los errores más comunes en proyectos GNSS es confundir el modelo de geoide con el sistema vertical.
Sistema vertical vigente: NAVD88.
Modelo geoidal utilizado para GNSS: GGM10.
Producto entregado al cliente: alturas ortométricas referidas a NAVD88.
Cambiar de geoide sin una transición formal del sistema vertical puede generar:
Diferencias numéricas en alturas.
Incompatibilidad con proyectos existentes.
Riesgos técnicos y contractuales.
El proyecto es técnico, académico o de evaluación.
Se realizan comparaciones entre modelos geoidales.
El cliente acepta explícitamente resultados referidos a un modelo distinto al oficial.
Se documenta claramente:
Modelo geoidal.
Sistema vertical.
Época de referencia.
El cliente solicita alturas oficiales o normativas.
Se requiere compatibilidad con cartografía y bases de datos de INEGI.
El proyecto corresponde a obra pública, catastro o ingeniería regulada.
En estos casos, el GGM10 sigue siendo el modelo correcto y vigente.
Antes de procesar datos GNSS, es indispensable definir:
Si el cliente requiere alturas referidas a NAVD88.
Si el proyecto debe integrarse con levantamientos previos.
Si existe una normativa institucional o contractual que cumplir.
En topografía profesional, la exactitud técnica debe ir acompañada de coherencia normativa.
El GGM25 apunta a una transición hacia:
Un sistema de alturas físicas moderno.
Referencia a un potencial de gravedad global.
Compatibilidad con el IHRS.
No obstante, esta transición aún se encuentra en proceso. Hasta que exista:
Declaratoria oficial.
Norma técnica.
Lineamientos claros de adopción.
El GGM10 continúa siendo el estándar operativo en México.
Actualmente:
El GGM10 es el geoide utilizado de forma operativa en México.
El sistema vertical vigente es NAVD88.
El GGM25 es un avance relevante, pero aún no sustituye al modelo oficial en la práctica profesional.
En geodesia aplicada, el modelo correcto no es el más reciente, sino el que garantiza coherencia técnica, compatibilidad y validez contractual.
En ECO y Geoeco te ayudamos a:
Definir el sistema vertical adecuado.
Procesar datos GNSS con GGM10 o modelos alternativos.
Prepararte técnicamente para la transición futura al GGM25.
Contáctanos y evita errores desde la base del proyecto.